Pedro Cintas

«Lo mucho o lo poco que he ganado me lo he quitado del pellejo»

Pedro Cintas es rápido. Rá­pido respondiendo, descu­briendo intenciones, ante­poniendose a las preguntas. Es rapido y muy disciplina­do. Cinturon negro de kara­te, se declara muy aficiona­do a la caza con galgos, a is hipica, a las motos. Nos sor­prende tanta actividad y so­bre todo descubrir, tras el jo­ven audaz y deportista, al cantaor Pedro Cintas. No es habitual en un artista fla­menco tanta diversidad de actividades. Pero eso es bue­no. El flamenco se mueve, y el que lo siente, el que lo in­terpreta, tambien.



-Usted ha trabajado en la construction. Ha sido enco­frador, ¿qué es más difícil?, ¿construir un cante, o ci­mentar el que uno ya hace?



-Es más difícil construir un cante porque en el flamenco ya esta todo creado. Se puede innovar, se puede mejorar, pero construir es muy dificil. El artista pacense no para de hater compas con los nudillos. Toc, tot, toc-toc y el flamen­co se le va agarrando a is piel como los dos tatuajes que marcan su antebrazo: ‘coraje’ y ‘respeto’. Dos directrices para marcar el paso por la vida. Dos leyendas necesarias pars ser `alguien’ en el dificil mundo del flamenco.



-¿Se ha sentido tentado a inventar algo en el flamenco?, ¿ha Ilegado a ver los ingredientes necesarios?



-Si siente uno curiosidad por probar cosas nuevas e it inno­ Tentado nunca, pero si uno a veces se ve innovan­do, pero yo estoy centrado en aprender. Antes de hater to­das esas cosas uno tiene que aprender, cimentar su carte­ra sobre unas bases bastantes fuertes, y una vez que tienes abiertos varios frentes y el ca­mino lo tienes claro, si pue­des pensar en eso.



-Y cuando ha pensado en in­novar, ¿qué se le ha ocurri­do?, ¿sobre que palos lo haría?



-Sobre palos de compas. Creo que a la hors de hater fusi6n seria mss dificil hacerlo sobre siguiriyas, tongs…, porque en los palos más duros quizás sea más dificil meterle cosas más raras, por llamarlo de alguna manera.



-¿Qué le parecen esas fusio­nes que han puesto de moda artistas como Pitingo, o Die­go el Cigala?



-A mi particularmente me gusta iY mira que yo soy muy purista!, pero me gusta todo lo que acaba sonando a fla­menco, lo que acaba bonito y acaba como debe quedar,…., y ademas, este tipo de fusiones muchas veces te llega a pelliz­car, y llega un momento en que te apasiona los que estás escuchando. Cosas como las que está haciendo Poveda, Pitingo…



-Para usted lo que hace Pi­tingo es flamenco?



-Para mi si.



-¿Se puede vivir del cante?



-Si. Entre otras cosas yo lo he hecho porque a mi particular­mente me faltaba trabajo, y el poco que tenia no lo podia compaginar con el flamenco, y este verano, la verdad, ha sido un año bastante bueno. A raíz de ganar los nacionales: el de Porrina de Badajoz, las Noches de Bajo Guía…, y lue­go el primer Premio Nacional de Antonio Mairena, al dia siguiente ganando el de Luce­na…., luego Ilegaron las galas, y más galas, más galas… En Murcia, en la Unión llegué hasta semifinales. Una buenísima experiencia. Hay que estudiar mucho y llegar a hacer los cantes, como se hacían allí.



-¿De que color es su cante?



-Blanco, soy muy transparente.­ Mas que cantar me gusta interpretar lo que estoy cantando, que se me yea metido en el papel. Es muy importan­te transmitir lo que estas sintiendo. Si estas cantando por siguiriyas y no te esta dolien­do, no estas gesticulando, dan­do a entender que te esta do­liendo lo que estas cantando y no llegas a la gente, de «na» me sirve.



Toc, tot-tot, tot  los nudillos siguen acompasando la entrevista. Acompañan a Pe­dro, el joven pacense y ali­mentan a Pedro Cintas, el ar­tista.



-¿Qué ha descubierto Pedro el hombre, de Pedro Cintas el cantaor?



-Es el mismo. Yo no encuen­tro diferencia entre artista y hombre porque antes que ar­tista soy persona. Mi manera de ser no tiene porque cam­biar al artista. No lo veo ni 10- gico, ni natural.



-¿Cómo le gustaría que un critico de flamenco le definiera?



-Como un cantaor ortodoxo que transmite y que llega a lo más alto por méritos propios. A mi me ha costado y me esta costando mucho trabajo. Aho­ra la Federación de Peñas está apostando mucho por mi, estoy viendo como estoy ha­ciendo las cosas.. pero me esta costando mucho trabajo. Lo mucho o lo poco que he ga­nado me lo he quitado del pellejo.­ He tenido momentos en que he pagado un precio a nivel personal muy alto por­que te derrumbas. Me he de­rrumbado. La gente que es­taba a mi alrededor también se ha derrumbado porque me veía mal.



-¿En qué momento se en­cuentra ahora?



-En uno dulce, sobre todo, a nivel personal. He acabo el afio trabajando muchisimo y ademas siendo reconocido, no solo en Extremadura, si no en Barcelona, Murcia…



-¿Que es lo mejor que han dicho de usted?



-Que la juventud no esta reñida con la sabiduría, y eso queda dicho en el escenario.



-¿Qué no sabemos los aficio­nados de los artistas extre­meños?



-El sufrimiento en el camino. No es oro todo lo que reluce. Detras de los logros que va­mos consiguiendo hay muchi­simas horas de sacrificio y es­tudio. De machacar un cante, otro cante.. Como le digo yo a mi padre: tengo los nudillos ya gastados de hacer compás encima de la mesa del orde­nador, porque yo tampoco puedo estar llamando a un guitarrista y a otro, y a otro, para que me dedique las horas que yo necesito de estudio, y tengo que dedicarlas haciendo nudillos encima de Ia mesa. Esas cosas la gente no las sabe.



-¿Cuál es su proximo objeti­vo?



-El Festival Internacional del Cante de las Minas. Voy con muchas ganas de optar a is Lampara. Este año pasado que­dé en semifinales, aunque no optaba a la Lampara porque no pasé por mineras. El sabor de boca que quedó en el público fue muy bueno. El del aficio­nado es el premio mas impor­tante que te llevas. Su calor y su reconocimiento.



Artículo publicado en hoy.es

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M. Isabel Rodríguez Palop

M. Isabel Rodríguez Palop

Una apasionada del Flamenco.

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