«Ha sido una experiencia inolvidable que tan solo me ha aportado cosas buenas»
Se puede decir que la vida de Juan Manuel Moreno (Carcaboso, 1979) ‘es de dulce’.
De dulce porque continúa trabajando en la empresa familiar La Cacereña, que se dedica a endulzar los paladares de la región, y porque así, ‘de dulce’ suena su primer trabajo ‘Dos Maneras de Sentir’ que presentará el próximo día 7 de octubre en el Teatro Alkázar de Plasencia. Un disco en el que el artista canta, produce, toca, escribe, y donde se pueden escuchar las ‘Joterías’, creación del propio Moreno, que nace a raíz de fusionar en los bordones y primas de su guitarra, jotas extremeñas y bulerías. Dulce para los oídos, para la música extremeña que nace, crece y se despereza, y dulce para nuestro flamenco que se mantiene, con trabajos como este, en ese primer nivel del que no podemos permitirnos bajar. Lo dicho, endulcen sus oídos, toquen el refinado gusto de estos nuevos cantes, respiren flamenco del bueno y cierren los ojos para seguir haciendo lo más difícil: saber escuchar.
—¿Cuáles son ‘las dos maneras de sentir’ de Juan Manuel Moreno?
–‘Mis dos maneras de sentir’ son la guitarra y el cante que es lo que he querido plasmar en este trabajo, aunque como sabe, el tema del cante siempre haya estado oculto en cierta forma.
—¿Cuándo y cómo nacen las ‘Joterías’?
—No sabría decirle un momento ni un lugar concreto, lo cierto es que ya desde hace mucho tiempo jugaba a flamenquear letras de jotas extremeñas. En el disco de Esther Merino ya dejé un detalle…, en mi pueblo existe mucha tradición en festivales de folklore, y supongo que mis vivencias me han llevado a ello. Creo que las jotas extremeñas hasta ahora no se habían versionado nunca, ni musicalmente con la guitarra flamenca ni con el cante, y me pareció que podría ser interesante grabar como suenan nuestras jotas desde el punto de vista flamenco, que es el mío. En cuanto al nombre era fácil, jotas más bulerías,…, pues ‘Joterías’ (se ríe)
—¿Siente la responsabilidad de haber albergado el nacimiento de un posible nuevo estilo flamenco?
—En realidad no, mi única pretensión ha sido disfrutar de la música que siento y poder aunar nuestras raíces en una sola con el máximo respeto a ambas, si esto además sirve para algo tan bueno como lo que comenta, pues estaría muy orgulloso de haber contribuido a ello.
—¿Esas ‘Joterías’ reivindican el papel de Cáceres en el flamenco de nuestra región?
—No, si hubiera querido hacer eso todas las jotas escogidas hubieran sido de Cáceres y sin embargo, las ‘Joterías’ están compuestas por tres jotas de Cáceres y otras dos de Badajoz, realmente he escogido cinco jotas que me gustaban, el único requisito es que fueran extremeñas.
—Canta, toca, produce, compone… ¿le ha quedado algo por hacer?
—Iba a bailar, pero se me olvidaron las botas de baile en casa y llamé a Jesús Ortega, que lo iba a hacer un poquito mejor que yo, que soy un pato ‘mareao’ (se vuelve a reír). Realmente yo me lo he guisado y me lo he comido como se suele decir, lo cual me ha dado mucha libertad pero a la vez también mucha responsabilidad.
—¿Ha sentido pudor al abarcar tantos registros?
—La verdad es que sí, pero por el cante. Aunque ya había grabado los coros en algunos de los discos en los que he participado, hacer cantes como tal, implicaba otra responsabilidad. En principio en el disco solo iba a grabar la guitarra y con colaboraciones de compañeros en el cante, pero cuando se estaba gestando todo me animaron sobre todo mi mujer y el cantaor Manuel Pajares a que yo grabara mis propias letras, y eso he hecho con el máximo respeto y con todo mi corazón.
—¿En qué papel se ha sentido más cómodo?
—Cada cosa ha tenido su encanto, yo me considero guitarrista, es lo que llevo haciendo toda mi vida, acompañar al cante y al baile, pero la verdad, no te puedo negar que esta experiencia me ha hecho sentirme realizado también en otras facetas que me inquietaban cómo artista, y donde me he encontrado más a gusto de lo que pensaba.
—¿Cómo se ve el flamenco desde el lado de la producción?
—En mi caso ha supuesto un gran esfuerzo económico y artístico, ya que todo ha sido por mi propia iniciativa, con la libertad de hacer lo que me ha apetecido sin presiones de ningún tipo. He grabado lo que he querido y como he querido y he aprendido muchas cosas en este trayecto. Me he conocido mucho más a mí mismo como artista. Ha sido una experiencia inolvidable que tan solo me ha aportado cosas buenas.
—Se ha rodeado de grandes profesionales, profesionales también extremeños como Ostalinda Suárez, Jesús Ortega o Diego Gallardo, ¿tenía claro que ese equipo era el que quería o lo ha ido conformando acorde a las necesidades?
—Desde un principio he tenido claro los artistas y amigos que quería que formaran parte de mi proyecto, tanto los extremeños que eran importantísimos para mí, como el grupo Agua Fresca de Carcaboso, como los de fuera: Yelsy Heredia, Roberto Jaen, Abel Harana, Juan Antonio Sánchez, Nerses Avakimyan, Domi Jr., Chema Hernandez que me grabó el videclip de las ‘Joterías’ y mi amigo y guitarrista Perico de la Paula que se encargó de realizar el prólogo. Todos los artistas han aportado tanta calidad artística como cariño hacia mi música, sin ellos no hubiera podido llevar a cabo este sueño.
—Este trabajo se grabó en abril de este año en Domiestudio de Morón de la Frontera, ¿por qué allí?
—Es un estudio que ya conocía por otros trabajos y me hacía mucha ilusión poder grabar allí por la calidad y el sonido tan flamenco que saca Domi en su estudio, además me encontré con una increíble calidad humana. El dueño, Domi Serralbo que es guitarrista de Morón de la Frontera, me lo puso todo muy fácil desde el principio, le encantó mi proyecto. Nos abrió las puertas de su casa tanto a mí como a mi familia, y se convirtió en una parte importantísima del disco, ayudándome en todo momento en el proceso tanto de grabación como mezcla, master, hasta conseguir tener el disco en mis manos.
—De ocho cantes del disco, seis han sido compuestos por usted. Letras en las que su hija y su mujer copan gran parte del protagonismo, ¿se sentía en deuda con sus sentimientos?, ¿es este disco una pieza más en su familia?
—Indudablemente, este disco está marcado por el amor a mi familia, tanto mi mujer como mi hija han estado presentes en todo momento, tanto en la creación como en el proceso de grabación, incluso participando también, como en la nana que le canta mi mujer Demelza a nuestra niña Paula, o mi niña jaleándome cuando le canto a ella por soleá. Ellas son los dos pilares que me sostienen y han sido la fuente absoluta de mi inspiración. Siempre se dice que un disco es como un hijo tuyo, y en parte es verdad, forma parte y nace de ti, y de tu forma de sentir, intentando mostrar lo que eres como artista.
—Y ahora, ¿con quién se queda?, ¿con el Juan Manuel cantaor, compositor, guitarrista, o productor?
—En todos he sido y me he sentido totalmente yo, por lo que me quedo con un poco de cada uno de ellos. Yo me siento afortunado por haber cumplido este sueño y tan sólo espero que a la gente le llegue y entienda mis ‘Dos maneras de sentir’